lunes, febrero 25, 2002

Algunas noches Michael Jackson se despierta llorando y se abraza al enano de su circo de Neverland que duerme junto a él. Le cuenta que ha vuelto a soñar con su padre que le grita: “¡Siempre serás negro!”
Algunas noches el enano le escucha. Otras, el Rey del Pop recrea en voz baja sus pesadillas mientras se mira las manos blancas quemadas y se pregunta si será verdad – como decía su padre – que algunas cosas nunca cambian. Después llora hasta dormirse otra vez.
Anoche, Michael Jackson soñó conmigo.