Myself

Aquí estoy, con gafas nuevas, discreto bronceado y feliz.

Ayer, al llegar a casa después de haber comido con mis padres, me puse el "Grandes Éxitos" de María Jiménez y me leí enterito el reportaje sobre la mala puta de Carolyn y el pobre de JFK Jr. que venía en el Vanity Fair (y luego me quejo yo de mi familia...)

También leí que mi adorado J.T. Leroy (el de 'Sarah') ahora es amigo de todas las petardas de Hollywood, que lo tienen en palmitas. Aunque la historia de cómo la clepti de la Ryder se lo encontró delante de la Ópera y lo invitó a entrar (porque a ella le sobraba una entrada, porque ella iba a ir con el Depp, pero se acababan de dejar) es muy bonita. Aunque no suene veraz.

Cuando terminé de leer el VF, fui a la cocina por un vaso de té helado y a través del patio descubrí que otro de mis vecinos también escuchaba a la Jiménez, 'y ahora ya, ahora ya, mi mundo es otrooooooo'. Como le dije a Miko esta mañana por mail: "otra que habría comido con sus padres..."

Después, seguí con 'The dice man' de Luke Rhinehart. Me gusta mucho:

'When you have the desire to kill yourself, you are supposed to see and 'accept it', but not, for Christ's sake, to kill yourself. If you desire to have carnal knowledge of a helpless teeny-bopper, you are supposed to accept your lust, and not lay a finger on even her big toe. If you hate your father, fine - but don't slug the bastard with a bat. Understand yourself, accept yourself, but do not be yourself.'

Aunque no sé si es la lectura ideal para esos momentos tan (post)familiares.

Feliz semana a todos.