domingo, junio 02, 2002

Fiesta, ¡qué fantástica, fantástica esta fiesta..!

Bonita fiesta anoche en la que, al contrario de la que cantaba Raffaella yo no descubrí tu amor (sólo eché de menos al mío, que se quedó en casa viendo una peli), pero en la que disfruté con el reencuentro con varias personas queridas cuyas vidas habían quedado fuera de mi vida y anoche se volvieron a cruzar a lo Altman.
Booksie, tan oriental y adorable, que se preocupa por mi estado anímico y me hizo escupir muchos de mis miedos y angustias en la mesa de la cocina (¿por qué lo mejor de las fiestas siempre pasa en la cocina?). Booksie que parece que ha encontrado un trabajo estupendo en Barcelona. Enhorabuena.
Nacho y Ami, con quienes da gusto hablar de libros y de todo.
Cris, que llegó tarde y se fue temprano para disgusto del anfitrión. Cris que me castigó Villalba - Madrid con los discos de Tenorio y Roza (iloveyouroza). Desde aquí lo digo: la crítica se ha cebado menos de lo que habría podido.

Yo fui bueno: apenas bebí, me drogué lo justo y me fui con ganas de haberme echado un baile. Qué le vamos a hacer. Fue una fuesta linda. Sin arrepentimientos a la mañana siguiente ni resaca paranoide. Una fiesta de persona mayor.