martes, junio 09, 2009

Silencio

Creo que lo que más echo de menos últimamente es el silencio. Me paso todo el día con la televisión encendida a la caza de pantallazos y frases. Todo el día. Desde que me levanto -o desde que llego del gimnasio por la mañana- hasta que me acuesto. Algunos días, con una pausa para comer en un bar de menú cerca de casa, a veces en compañía y a veces solo, con un libro. Otros muchos días, como en casa cualquier cosa, con la televisión encendida, a la zaga.

Lo que más valoro de mis viernes de descanso es el silencio. Los sábados estamos juntos, y prefiero tu voz. Pero los viernes... no hay televisión los viernes, no hay radio, no suena la música del iPod que me marca el ritmo del cardio en el gimnasio tres días a la semana. Solo hay ruidos afuera, ajenos, a los que no tengo que prestar atención.

El ruido constante atonta, embrutece, descerebra. Si no fuera por los viernes (y esos sábados contigo...)