jueves, junio 26, 2003

MTV Day

Llegamos cuando estaban actuando Los Elefantes, un grupo nuevo que suena como una mezcla entre Medina Azahara, El Último de la Fila y Héroes del Silencio. Tremendo me parece poco. ¡Y son una revelación! Y venden discos como rosquillas. De verdad que no me extraña que haya días en que Nacho Canut quiera dejar de ser músico.

Después, Los Piratas. Pues vale. Los Piratas.

A continuación: ¡OBK! ¡De puta madreeeeee!
Tengo que reconocer que cuando sacaron su primer disco, no pensé que llegarían a durar tantos años. Tantos como las mechas del cantante y su corte de pelo que, increíblemente, es el mismo que hace tantos años, cuando yo no daba un duro por su permanencia en el chiringo discográfico.

Y para terminar... ¡sí, sí, sí... chavalotes! ¡Jarabe de Palo! Con esa variedad musical, esa apuesta por el riesgo, por la vanguardia... Joder Jarabe de Palo, qué pereza más grande. Qué espanto. Qué manera de aburrir.

Pese al horror musical, la velada fue muy divertida. Y es que no hay nada como la buena compañía. Y la cerveza gratis en la Zona VIP (esta vez sí, esta vez sí había alcohol). Y el botín de Doritos (qué overdose...) Y el señor de amarillo, que al final se acabó ligando a la de la melena caoba. Ay, las drogas qué malas son... (habrán pensado esos dos esta mañana cuando se hayan despertado).

Pero yo me lo pasé fenomenal. Porque a mí es muy fácil hacerme feliz. Y le agradezco mucho a la Señora Estupenda C.S. su invitación. Y la próxima vez, le pedimos a alguien que nos venda un euro de droga...